Tipo de ruta: ida y vuelta.
Distancia: 5,650 Km.
Desnivel máximo: 28 m.
Desnivel acumulado: 28 m.
La sierra del Yugo es una de las pocas sierras de la Ribera navarra. Con sus casi 500 metros de altura es un extraordinario balcón sobre el Parque Natural de las Bardenas Reales, uno de los espacios más singulares de Navarra y de todo el norte de España. Aquí, las condiciones climáticas y geológicas han formado un paisaje desértico único. La mayoría lo conocen aunque no hayan estado, ya que muchos anuncios publicitarios de los que vemos en televisión han aprovechado los escenarios de este espacio singular.
Creo que la visita a las Bardenas debe completarse obligatoriamente con la inmejorable visión de conjunto que se tiene desde el santuario de la Virgen del Yugo. Esta ruta aprovecha las condiciones de mirador de la sierra del Yugo y recorre su cordal durante varios kilómetros hasta llegar a su máxima altura.
No sólo la ruta tiene el atractivo de ser el mejor mirador de Bardenas. También visita uno de los santuarios marianos más importantes de la Ribera: la ermita de la Virgen del Yugo.
Recomiendo llevar prismáticos para mejor apreciar la belleza primitiva de los cabezos que destacan sobre el terreno de la Bardena Blanca.
(Km. 0,00) La ruta comienza en la ermita de la Virgen del Yugo. Se llega a ella desde el desvío señalizado que se encuentra entre los pueblos de Valtierra y Arguedas. Cuando estamos llegando a la ermita es muy recomendable dejar pasar el primer desvío hacia la misma y coger el segundo. Esto es porque el primer desvío nos acerca a la ermita por una pista de tierra en mal estado, mientras que el segundo desvío lleva por una cómoda carretera asfaltada.
La ermita se encuentra en lo alto del cordal. A su alrededor hay un área recreativa con bancos, juegos de niños y barbacoas.
Tras visitar la ermita (para encontrar la ermita abierta es mejor ir en fin de semana), nos acercamos al Mirador de las Bardenas, que se encuentra a pocos metros. Ya sólo por las vistas merece la pena acercarse hasta aquí. Desde el mirador, que tiene una tabla de orientación, abarcamos la vista más extensa del gran parque natural. En días buenos llegamos a ver los Pirineos. En invierno es hermoso el contraste entre las cumbres nevadas de los picos de más de 2.000 metros del Pirineo con la sequedad desértica de Bardena blanca.
(Km. 0,370) Volvemos al aparcamiento y cogemos la pista de tierra que desde aquí arranca en dirección sureste. Poco más adelante llegamos a otro mirador: el Mirador de la Ribera. Desde aquí tenemos una panorámica de las tierras de la Cuenca del Ebro. La vista se extiende hasta el Moncayo, ya en Aragón, que con sus más de 2.300 metros domina el horizonte.
Aunque estos son los dos miradores habilitados, toda esta ruta es un gran mirador, ya que recorre el cordal de la sierra del Yugo hasta su punto más alto.
(Km. 1,450) Continuamos por la pista y llegamos a la valla que rodea el parque de ocio y aventura Senda Viva. Si queremos tranquilidad en nuestra excursión, es mejor hacerla en invierno, cuando el parque está cerrado. Giramos a la izquierda y avanzamos por la pista que va junto al vallado por el exterior. Mientras rodeamos Senda Viva tendremos algunas de las mejores panorámicas de las Bardenas.
(Km. 2,530) Tras acabar el vallado, bajamos un poco hasta un cruce de pistas. Seguimos de frente y empezamos la ascensión hacia el punto más alto de la Sierra del Yugo.
(Km. 3,00) La pista se acaba. Continuamos por las rodadas que a través de los campos llevan al vértice geodésico que desde atrás era bien visible. Enclavado a 497 metros de altura es el punto culminante de esta agradable sierra.
(Km. 5,600) Volvemos por el mismo camino de nuevo disfrutando de las panorámicas. Si hemos calculado bien y se nos va echando la tarde encima, disfrutaremos de un espectáculo único: las Bardenas al atardecer. Los tonos rojos en este paisaje irreal, casi extraterrestre, nos hará imaginar que hemos sido los primeros humanos en pisar Marte…
Para saber más sobre la ermita, consultar: Ermita de la Virgen del Yugo.
Cuando bajemos de la sierra podemos visitar la Torraza de Valtierra, torre antigua en donde se excavó la primera necrópolis de la Edad del Hierro que apareció en Navarra. Más información en: Necrópolis de la Torraza.
Si te gusta el senderismo, el arte y la arqueología, prueba a visitar mis otros blogs:
Esta ruta combina naturaleza e Historia. Recorre parte de una de las reservas naturales más singulares de Navarra, la Foz de Arbayún. También acerca al caminante a la ermita de San Pedro de Usún, con origen en los inicios de la Historia del reino de Navarra.
La ruta parte de Usún, un pequeño caserío que se encuentra en la vertiente norte de la sierra de Leire.
Tipo de ruta: circular.
Distancia: 3,5 Km.
Desnivel máximo: 57 m.
Desnivel acumulado: 92 m.
(Km. 0,00) Dejamos el coche en el aparcamiento que está a la entrada del pueblo. Comenzamos a andar por la calle que es la continuación de la carretera y que gira hacia la derecha. Pasamos junto a una fuente que queda a nuestra izquierda. Pocos metros más adelante, también a la izquierda, sale una pista, en un principio de cemento pero que enseguida pasa a ser de tierra. La pista comienza en ligero descenso. Continuamos por aquí dejando atrás el caserío.
(Km. 0,350) Bifurcación. Seguimos por la derecha. Pasamos junto a un centro hípico, por lo que veremos caballos a los lados del camino que harán más ameno el paseo.
(Km. 0,975) Llegamos a un vallado. Atravesamos por el paso correspondiente y continuamos bajando hacia el río.
(Km. 1,250) Llegamos al puente que cruza el río Salazar. Nos encontramos en la salida de la Foz de Arbayún, de la que vemos sus paredones cercanos al puente.
Cruzamos el puente. A pocos metros una nueva bifurcación. Seguimos por la derecha.
(Km. 1,670) El sendero sigue ahora el río Salazar. En cinco minutos llegamos a la Ermita de San Pedro de Usún. Enclavada en este lugar solitario de gran belleza es el primer templo del que se tiene constancia en los documentos históricos navarros, lo que le da una enorme importancia a pesar de su sencillez. Para saber más sobre la ermita, sus leyendas y su hermoso crismón consultar el enlace: ERMITA DE SAN PEDRO DE USÚN.
Podemos acercarnos desde la ermita al cercano río Salazar, que aquí crea un bello paraje.
Tras visitar la ermita, continuamos el sendero que sigue paralelo al río, pero que poco a poco se va alejando del cauce.
(Km. 2,200) Salimos de la foz. El paisaje se abre. Ya vemos el pueblo de Usún a la derecha.
(Km. 2,600) El camino avanza entre unos campos de cultivo. Viene a morir a una pista ancha que hay que seguir a la derecha. Bajamos de nuevo hacia el río.
(Km. 2,830) Llegamos al río. Es probable que haya que descalzarse para vadearlo ya que el río sobrepasa la pista de cemento que lo cruza. Apenas hay un palmo de profundidad, por lo que no hay más dificultad que la fría agua del Salazar.
(Km. 3,460) Sólo queda afrontar el último repecho para volver al pueblo.
La ruta debería completarse con la visita al MIRADOR DE LA FOZ DE ARBAYÚN, donde disfrutaremos de la mejor panorámica de este espacio natural.
Tipo de ruta: Ida y vuelta.
Distancia: 5,900 Km.
Desnivel máximo: 220 m.
Desnivel acumulado: 228 m.
Probablemente la ruta a la laguna grande de Peñalara sea la ruta de montaña que más personas han realizado en España. Ello se debe a que es la ruta más conocida de la sierra de Madrid, con el ingente número de visitantes que suben desde la gran ciudad. Además a esto se añade la facilidad para realizar la misma y su belleza. Toda la ruta transcurre dentro del Parque Natural de la cumbre, circo y Lagunas de Peñalara. Aquí no vamos a llegar a la cumbre de Peñalara, pero si vamos a visitar el circo y la laguna más importante de la sierra. No sería de extrañar la pronta declaración de toda esta zona como Parque Nacional, asunto del que se ha tratado en no pocas ocasiones por diferentes instancias.
Debido a la abundancia de visitantes es recomendable hacer la ruta fuera del fin de semana, para así disfrutar más tranquilos de esta belleza natural.
(Km. 0,00) La ruta parte del puerto de Cotos, donde hay aparcamientos para dejar el coche.
(Km. 0,215) Subimos desde el aparcamiento a la Casa del Parque, que es el centro de interpretación del Parque Natural. Conviene visitarlo para obtener información de los valores naturales del espacio protegido.
(Km. 0,630) Comenzamos a andar por la pista y nos internamos en el bosque de pino silvestre. Poco más adelante, tras pasar una primera fuente, está el Mirador de la Gitana. Desgraciadamente, los pinos han crecido tanto que no dejan apreciar la panorámica completa que antes se disfrutaba desde aquí. No obstante se tiene una gran vista de Cabeza de Hierro Mayor, la segunda cima en altura de la Comunidad de Madrid.
(Km. 0,660) A sólo 30 metros del mirador hay una bifurcación. A la izquierda es el camino que lleva a la cumbre de Peñalara. Nosotros seguimos a la derecha por el sendero que nos va a llevar a la laguna grande.
(Km. 1,300) El sendero pasa junto a una fuente.
El sendero es un bonito mirador sobre la Cuerda Larga y el valle del Lozoya. A lo lejos vemos el embalse, al fondo del valle, donde se ha encontrado uno de los más importantes yacimientos de neandertales de España.
(Km. 2,250) Llegamos al circo de Peñalara. La erosión glaciar formó estos paredones de piedra que son las estribaciones más elevadas de la Comunidad de Madrid. Es una zona altamente protegida, por lo que está prohibido salirse del camino marcado. Continuamos hacia la laguna grande, que todavía no es visible.
(Km. 2,940) Llegamos a la laguna grande de Peñalara. Conviene rodearla un poco por la derecha para obtener la mejor vista de la misma. Antiguamente se hacía aquí una curiosa competición de atravesar a nado la laguna. Hoy está protegida para preservar lo que es una pequeña joya dentro de la gran sierra de Guadarrama.
Si es posible lo mejor es llegar aquí a última hora. Además de haber menos visitantes, es muy hermoso ver atardecer en el circo rocoso, notar como el espejo de la laguna refleja la cambiante luminosidad y ver como la nieve en Cabeza de Hierro, en la distancia, toma todos rojizos muy hermosos.
(Km. 5,900) Volvemos por el mismo camino al aparcamiento.
Pulsa sobre el mapa para hacerlo más grande. Luego puedes guardarlo o imprimirlo para llevarlo en tu ruta. En el segundo mapa tienes la localización del punto de inicio de la ruta.
Tipo de ruta: ida y vuelta. Distancia: 7,1 Km. Desnivel máximo: 396 m. Desnivel acumulado: 396 m.
Idokorri es una de las cimas de primera categoría de Navarra puntuable para el concurso de los cien montes. Se asciende a esta cima desde el caserío de Napal, al que se llega desde un desvío en la carretera que une Lumbier y Navascués.
La ascensión a esta cima es sencilla, ofrece buenas panorámicas y uno de los vértices geodésicos de la Comunidad Foral.
(Km. 0,00) Dejamos el vehículo en la entrada del pueblo. Comenzamos a atravesar el caserío por su calle principal.
Pasamos junto a la iglesia. Continuando la calle salimos enseguida del pueblo. La calle se convierte ahora en pista de tierra que va ascendiendo hacia la montaña.
Según vamos ascendiendo tenemos buenas vistas de la Peña de Izaga hacia el oeste. También disfrutamos de una buena panorámica de Napal y de la extraña formación rocosa que se alza en sus proximidades y que es un castro y posible santuario de la Edad del Hierro.
(Km. 0,850) Llegamos a lo alto del primer collado. Aquí hay un cruce de pistas. Seguimos por la derecha.
(Km. 1,410) Seguimos subiendo. Llegamos a una recta donde el ascenso se hace más suave. Al final de esta recta, giramos a la derecha y empezamos a bajar. 50 metros más adelante a la derecha sale otra pista. Por aquí seguimos.
Hasta ahora hemos atravesado vegetación propia del bosque mediterráneo, con encinas y carrascas. Ahora empieza a dominar el bosque de pinos de repoblación.
(Km. 1,650) Llegamos a una bifurcación. Seguimos por la derecha, siempre subiendo. Según ascendemos, donde el bosque de pinos de abre, se ofrecen las mejores vistas de la caminata, con dominio de los valles que se extienden entre la sierra de Leire y la Peña de Izaga. Se llega a ver la sierra de San Donato e incluso al sierra de Aizkorri, ya en Guipuzkoa.
(Km. 2,930) Llegamos al vértice geodésico. Curiosamente no es el punto más alto de la sierra de Idokorri.
(Km. 2,970) Por eso seguimos por el cordal en la misma dirección este para buscar la cima. Pocos metros más adelante del vértice tenemos una bifurcación de caminos. Seguimos por la derecha. Dejamos así la pista mejor marcada y continuamos por el sendero más próximo al cordal. Todavía estamos a 600 metros de distancia de la cumbre.
(Km. 3,220) Aquí hay que tener cuidado. En un momento dado, el camino hace una bajada. Justo al comienzo de la bajada, a la izquierda, nace un sendero entre los bojes. Está marcado su inicio con un hito de piedras. Seguimos por aquí.
Empezamos a progresar entre pasillos de bojes que se alternan con zonas más abiertas.
(Km. 3,540) Por fin llegamos a la cumbre de Idokorri. Señala la cima un buzón montañero. La vegetación no deja una panorámica amplia, si bien podremos disfrutar de una vista aérea de parte de la Foz de Arbayún y, hacia el este, veremos algunos de los Pirineos de más de 2.000 metros de altura.
La Higa de Monreal es una de las montañas más emblemáticas de Navarra. Situada casi en el mismo centro geográfico de la comunidad foral, es un mirador privilegiado, uno de los mejores de Navarra. Al mismo tiempo es referencia visual única desde la mayoría de las montañas de Navarra. Cualquier montañero en sus ascensiones a las cimas de la Comunidad Foral, reconoce el perfil triangular inconfundible de la Higa que Monreal coronada por el repetidor. Es como un hito familiar que el montañero siempre busca en los horizontes navarros para orientar sus panorámicas y para ubicar la capital cercana, Pamplona.
Además su forma piramidal la hace sumamente atrayente para el montañero. Su cercanía Pamplona la hace una de las montañas más visitadas.
Esta ruta asciende por la vertiente sur de la Higa de Monreal. Es la opción más montañera. Además así recorremos las vertientes norte, oeste y sur de la montaña. Para la bajada optaremos por la vía más clásica, atajando las revueltas de la pista de servicio del repetidor de la cima por senderos que se abren pasó entre los bojes de la ladera norte.
(Km. 0,00) Dejamos el coche a la entrada del pueblo de Monreal en una explanada junto a una pista polideportiva.
Empezamos a descender por el pueblo hasta llegar a la parte más baja donde se encuentra el río y el bonito puente medieval que lo cruza.
(Km. 0,250) Cruzamos el río por la pista asfaltada que está a pocos metros del puente medieval.
(Km. 0,500)Continuamos por la pista asfaltada y, poco más adelante, hay que tener cuidado ya que hay que salirse de de la misma por la derecha, más o menos a la altura en que otra pista se bifurca hacia la izquierda y antes de cruzar por un puente con barandilla de metal un riachuelo. Cogemos por tanto el sendero de la derecha.
(Km. 0,830) El sendero desemboca en una pista asaltada. Seguimos la pista hacia la derecha.
(Km. 1,050) Poco más adelante, cuando la pista asfaltada da un giro de 180° hacia la izquierda tenemos que salimos de la misma por la derecha siguiendo una pista de tierra.
(Km. 1,270) Bifurcación. Seguimos por la derecha, en la misma dirección que llevamos.
(Km. 1,670) La pista se interna en un espeso pinar.
(Km. 2,840) Salimos del pinar. A la derecha se nos ofrecen excelentes vistas del valle y de las montañas que lo cierran por Norte. A partir de aquí la subida se hace más empinada.
La pista cambia de dirección y ahora se dirige hacia el sur. A la izquierda y arriba ya vemos la antena repetidora que corona la Higa de Monreal.
Finaliza el primer repecho y ahora la pista vuelve a allanarse. Nos internamos en el barranco que separa la Higa de Monreal de la sierra de Alaitz.
En el barranco la vegetación es autóctona, con hayedos, fresnos y bojes, contrastando con la anterior vegetación de pinos de repoblación.
(Km. 4,975) Llegamos a un cruce de pistas. Cogemos la pista que está más a la izquierda. Desde aquí tenemos un bella vista de la Higa.
(Km. 5,060) Unos metros más adelante, en un pequeño claro, hay que coger la pista que bajando un poco sale a la izquierda y va a cruzar una vaguada.
Desde aquí empezamos lo que realmente es la subida a la Higa de Monreal por su vertiente sur.
(Km. 5,560) Medio kilómetro más adelante, cuando la pista gira la derecha, a la izquierda vemos un hito de piedras y un cartel que pone dirección a la Higa (cartel bastante frágil, no se lo que durará). Aquí dejamos la pista y ascendemos siguiendo los hitos de piedras.
Los hitos de piedra nos van guiando por un estrecho sendero que se abre camino en la ladera entre los bojes.
Hay que ir atentó a la señalización de los hitos ya que en algunos lugares se desdibuja el sendero.
(Km. 6,030) Aquí hacemos una pequeña trepa para salvar un primer escalón de piedra. Es una trepa sencilla.
Nos acercamos al impresionante paredón de piedra que protege la cima de la Higa de Monreal.
(Km. 6,400) Llegamos al último escalón de piedra. Para facilitar la ascensión se han colocado aquí varios tramos de cadenas que ayudan mucho en la subida.
(Km. 6,580) Esta es la parte más empinada de la ascensión pero que no tiene peligro, sobre todo por la ayuda de las cadenas. Llegamos por fin a lo alto de la Higa de Monreal. La cima está ocupada por el repetidor. Justo al lado del recinto vallado, encontramos el buzón montañero.
Desde aquí las vistas de toda Navarra son impresionantes. Hacia el sur se ven las sierras de Moncayo, en Aragón, y de San Lorenzo, en Castilla. Hacia el este los Pirineos. Hacia el oeste los montes vascos, y hacia el norte las montañas que separan a Navarra de Francia y que ocultan el valle de Baztan.
(Km. 6,800) Rodeamos el vallado por la derecha y llegamos a la ermita de Santa Bárbara.
Curiosa es la figura de cabeza de toro grabada junto a la puerta. Puede que sea una reutilización de un pilar antiguo.
Desde la ermita es donde se tiene la mejor vista de los altos Pirineos. Mucho más cerca destaca la peña Izaga.
Para el descenso empezamos a bajar por la pista asfaltada que sube hasta repetidor. Para hacer más rápida la bajada aprovecharemos los atajos que están marcados con hitos de piedra.
En la bajada tenemos grandes vistas de la cuenca de Pamplona, con la capital extendida en el llano.
(Km. 10,00) Bifurcación de senderos. Seguimos por la derecha.
(Km. 10,300) Salimos a una pista asfaltada. Seguimos a la izquierda.Enlazamos con el camino por el que empezamos la subida estamos ya muy cerca del pueblo.
(Km. 11,470) Volvemos a entrar en Monreal por el hermoso puente medieval, donde podemos echar una última mirada a la hermosa pirámide de la Higa.
Podemos rematar la excursión, si aún nos quedan fuerzas, subiendo al Cerro del Castillo. Para más información sobre el castillo de Monreal consultar: Castillo y castro de Monreal.
Pulsa sobre el mapa para hacerlo más grande. Luego puedes guardarlo o imprimirlo para llevarlo en tu ruta. En el segundo mapa tienes la localización del punto de inicio de la ruta.