Esta ruta lleva al mirador de Zamariain que ofrece buenas panorámicas sobre el valle del rio Irati. La ruta es fácil, apta para familias, transcurriendo en su mayor parte por una cómoda pista de tierra.
La caminata parte de Garaioa, un pequeño pueblo del valle de Aezkoa, al norte de Navarra.
En la ruta atravesaremos un bosque de hayas. En el bosque conoceremos el haya “el ciervo”, un árbol de curiosa tipología cuyo tronco semeja a este habitante del bosque.
(Km. 0,00) Partimos de Garaioa, pueblo del Valle de Aezkoa. Dejamos el coche en la plaza. Desde la plaza volvemos a la carretera y caminamos unos metros en dirección a las Abaurreas (a la izquierda).
(Km. 0,150) Enseguida vemos una calle que sale a la derecha en cuyo comienzo hay un poste informativo de varias rutas senderistas. Una de ellas es la del mirador de Zamariain.
(Km. 2,060) Ascendemos por una pista de cemento. Llegamos a una bifurcación. Seguimos por la derecha. En el mismo cruce a la derecha del camino hay una anciana haya.
(Km. 2,210) Nueva bifurcación cerca de una borda. Seguimos por la izquierda, por el camino que NO pasa junto a la borda.
(Km. 2,290) Pocos metros más adelante hay que salirse de la pista de cemento por la izquierda.
(Km. 2,760) Cuando la pista da un giro cerrado a la izquierda hay que salirse a la derecha para tomar un sendero que nace tras una alambrada.
(Km. 3,360) Vamos ascendiendo cómodamente por un bosque de hayas. A poco más de un kilómetro hay que estar atentos. Cuando el camino empieza a bajar y hace un giro pronunciado a la izquierda hay que salirse de la pista a la derecha por un sendero no muy marcado que nos va a llevar al mirador, ya muy cercano. Marcas verdes y blancas de sendero local nos ayudan para no perdernos.
(Km. 3,440) Las marcas nos llevan entre los árboles. Pasamos junto a una curiosa haya cuyo tronco recuerda la cabeza de un ciervo. Es el haya “El ciervo”. En estos bosques de hayas tan evocadores podemos imaginar junto al haya como el Basajaun, “el señor del bosque”, convirtió en árbol al más hermoso ciervo de estos bosques. Así, su gran cornamenta quedó para siempre adornando el bosque en forma de las gruesas ramas que se alzan hacia el cielo.
(Km. 3,500) Pocos metros más adelante el bosque se abre a un cortado que cae a pico sobre el bosque. Es el mirador de Zamariain. Desde aquí tenemos una buena panorámica a vista de pájaro de una de las zonas más frondosas del valle del río Irati. Entre las montañas que se ven desde aquí destacan el Corona, el Larrogain y cerrando el horizonte la Higa de Monreal y la Peña de Izaga.
(Km. 7,00) Sólo queda volver a Garaioa tras deleitarnos en este mirador natural que es un bonito balcón escondido en el bosque.
Una vez de vuelta en el pueblo de Garaioa merece la pena dar una vuelta para conocer un típico pueblo del Pirineo navarro. Más información en: Garaioa pueblo con encanto cerca de la Selva de Irati
© Julio Asunción
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