También podemos completar haciendo un desvío a otro alto cercano donde está documentado que existió hace más de 2000 años un poblado de la Edad del Hierro.
Otro de los atractivos de la ruta es el bosque de carrascas que atravesaremos en el camino hacia el mirador de Lazkua.
(Km. 0,00) La ruta comienza en el pequeño pueblo de Eraul. Dejamos el coche a la entrada del pueblo, junto al antiguo lavadero.
Junto al lavadero tomamos la calle Ticularrenta, con la que salimos del pueblo en dirección suroeste.
(Km. 0,460) Llegamos a un paso vallado que se encuentra al principio de un frondoso carrascar. Atravesamos el paso dejándolo cerrado. Emezamos a disfrutar el bosque de encinas.
(Km. 0,870) Bifurcación. Seguimos por la derecha. Sólo unos metros más adelante nueva bifurcación. También seguimos a la derecha. Siempre por la pista principal.
(Km. 1,150) Llegamos al collado. Este collado separa la peña donde está el mirador de Lazkua (a la derecha) del alto de Altikogaña (a la izquierda), donde en su día hubo un poblado de la Edad del Hierro. En el collado hay un cruce con tres caminos. El de la derecha va sin pérdida al mirador de Lazkua. Pero si tenemos interés y no nos importa llevarnos algún arañazo con la vegetación que dificulta el camino, podemos tomar primero el sendero de la izquierda para coronar Altikogaña.
Hay que advertir que no es sencillo ni está marcado el camino hasta la cima de Altikogaña. Además aunque se gane la cima se pueden tener problemas para encontrar el camino de vuelta al collado. Por esto, si no se lleva GPS para seguir la ruta o no se está seguro, es mejor dejar el desvío a Altikogaña y subir directamente desde el collado al mirador de Lazkua.
(Km. 1,510) Llegamos a la cima de Altikogaña. En la parte oeste es un precipicio que cae a pico sobre el bosque de encinas que cubre la ladera. Las panorámicas son impresionantes, parecidas a las que luego tendremos desde el Mirador de Lazkua. Desde aquí también tenemos una gran vista del paredón calizo donde está el mirador.
El control visual del valle es excelente. Esto era una ventaja estratégica que tuvieron en cuenta los habitantes de este castro cuando eligieron el lugar para levantar su poblado. Además el castro es inaccesible por el oeste debido al paredón natural que lo protege. A pesar de esto, el castro fue destruido por los romanos en el transcurso de la guerra civil entre Sertorio y Pompeyo (80-70 a.C).
(Km. 1,880) Regresamos al collado y tomamos el sendero que sube al Mirador de Lazkua.
(Km. 2,148) Atravesamos un paso entre rocas y salimos al Mirador de Lazkua.
Es impresionante el balcón natural que la naturaleza ha labrado en la pared caliza. 250 metros de altura nos separan del valle.
En el mirador hay una cruz. Desde aquí no es difícil sentirse como un buitre o como una rapaz que desde la altura divisa amplios paisajes. Es seguro que veremos buitres volando a poca altura sobre nuestras cabezas, ya que este cortado también es su casa.
Desde el mirador destaca, hacia la derecha, la vista de los paredones de la sierra de Lokiz. Hacia la izquierda, cercano y coronado por una antena, Belastegi. Más al fondo dos picos emblemáticos de Tierra Estella: Montejurra y Monjardín.
El lugar es muy especial, tanto que pienso que no es descabellada la hipótesis de que fue un lugar de importancia sagrada y ritual en la prehistoria.
Para profundizar en esta posibilidad consultar: Santuario prehistórico de Lazkua.
Desde el mirador vemos un poco más abajo una pequeña imagen de una Virgen. Vamos a acercarnos hasta ella.
(Km. 2,313) Para ello volvemos sobre nuestros pasos. Tras pasar el paso rocoso y antes de llegar al collado debemos de ir atentos para tomar el sendero que a la derecha lleva a la parte baja del mirador. Referencia para no pasarnos el desvío: está veinte metros antes de llegar a un paso en una alambrada. Además en el desvío hay una piedra de considerable tamaño con otras encima.
(Km. 2,330) Muy cerca del desvío hay una pequeña cueva. Seguimos avanzando junto a la pared de roca, bajo el mirador. Al llegar a la altura de la cruz del mirador hay que desviarse a la izquierda, entre los árboles.
(Km. 2,349) Enseguida damos con la pequeña Virgen, que está sobre un peñasco.
Sólo queda volver al pueblo de Eraúl atravesando de nuevo el carrascar.
(Km. 3,630) Una vez en el pueblo merece la pena acercarse a la encina más importante de estos lares: la Encina de Eraul, que está declarada Monumento Natural. Más información: Ruta a la Encina de Eraul.
julioasuncion@hotmail.com
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